Recomenzar

Recordando aquella mirada

Recae sobre mí, lo bello de este secreto

Frágil como un cristal, formado de pequeños

Sueños disfrazados de anhelos,

Cuerpos envueltos de deseos….

¿Cómo caí en este misterio?

Tal vez en aquel momento, traspasando las barreras

De mis miedos, los prejuicios ignorantes, los oscuros fantasmas.

En ese preciso momento empieza en reencuentro, entre lo vivo y lo muerto

Entre mis misterios y los lienzos del fracaso aun no marcado

Formando un clásico cuento, que recito en mis ufanos momentos…

Ser o no ser he ahí el dilema, del aquel que no sobrevivió ante el amor,

Muerto yace, en palabras de poetas…

Abre aquella ventana de la cual se olvido

Y negó con todo su ser, de la cual sobrevivió…

Toca desesperadamente, con gritos de angustias modestias

Camina a paso lento con gran rencor,

Se detiene al recordar aquella Julieta,

Su hechicera amada, su prisionera atada en castillos de cobre y plata…

Tímida su mirada, inocente su presencia, confusa esta su mente

Al imaginar su verdugo y recordar aquel cruel final

Para mi dulce Romeo creador de sueños y penas….

Recuerdo

Este silencio agobiante os acompaña, a mi soledad y presencia...

Recorre mis lágrimas como agua dulce de aquellos besos,

un murmuro acompaña aquel miedo que invade mi habitación,

este causa desvelos en mis sueños, y la aparición de aquel ángel sombrío en cada noche estrellada,

aquel que recae ante mi necesidad....

Que ángel tan masoquista

y que ingenua la niña, t

an estúpidos al odiar aquel silencio

y negar cualquier momento al averno disfrazado de dulce cielo…